Al final no recordaremos las palabras de nuestros enemigos sino el silencio de nuestros amigos»
• Martin Luther King
Escribo sobre amor, tristeza y felicidad, pero nunca pasó por mi mente que llegaría a escribir sobre cómo nuestra amistad llegó a su fin, de cuánto te extraño.
Recordaré siempre a mi amiga, sí, a la mía, esa dulce y hermosa niña que pasó por mi vida, aquella que hablaba sin parar y a quien yo escuchaba. Te extraño a ti, no a esa persona en la que te convertiste.
Dicen que solo hay dos cosas que duelen perder en esta vida: un familiar y un matrimonio, pero sabes, yo agregaría una tercera cosa a esa lista: perder a una amiga, perderte a ti.
Estuviste en mi infancia y ahí te quedaste, marcada con tinta indeleble. Recuerdo el primer día que te vi, éramos tan pequeñas y, a la vez, tan grandes para decidir ser amigas. Recuerdo cómo me contabas tus cosas y me arrepiento de no haber tenido la confianza, en ese momento, de contarte las mías. Me arrepiento tanto, porque ahora quiero contarte todo y no puedo.
Te veo como un admirador ve a una obra de arte, de lejos, sin poder tocarte ni hablarte. Me obligo cada día a odiarte, porque me duele saber que te extraño, que te quiero, y tú ya no lo haces. Una de las dos logró superarlo, y no fui yo.
Ya no soy tu primera opción, ya no soy tu amiga, solo soy una conocida a quien saludas de lejos con la mirada. Te has robado mis lágrimas, lágrimas que en la noche, cuando todos duermen, son derramadas sobre la almohada. Te has robado cada uno de mis escritos, pues es en ellos donde puedo gritar y decir lo que siento sobre esto.
A mamá ya no le agradas. Ella fue testigo de cómo su niña lloraba porque su amiga la reemplazaba, pero a pesar de todo, ella sigue preguntando por ti y te sigue teniendo en cuenta en cada fiesta de cumpleaños. Dicen que los amigos son familia, pero te fuiste como un padre en la noche, te fuiste y me dejaste, y creo que no hice nada para evitarlo. Creo que fui yo la razón por la cual te fuiste, y no te culpo, yo también me iría, sabes.
Te extraño y quiero que tú también lo hagas, quiero que todo vuelva a ser como antes, pero en el fondo de mi corazón sé que eso no va a pasar, que ya no serás otra vez mi amiga. El tiempo pasa y las personas cambian, y nosotras cambiamos tanto que ya no nos reconocemos.
Me despido de ti, y aunque sé que siempre te llevaré en mi corazón, que siempre te veré como la gran amiga que alguna vez tuve, tengo que dejar ir ese recuerdo que tanto daño me hace. Y puede que eso no signifique que no vuelva a escribir sobre ti, porque lo haré, lo haré cada momento en que tu recuerdo pase por mi mente, pero tengo que dejar de buscarte, tengo que aceptar que ya no somos iguales, que nuestra amistad acabó hace tanto tiempo.
Te quiero demasiado y siempre te querré, y aunque sé que nunca leerás esto, aquí me despido de ti. Te quiero, mi dulce niña.
Tu amigo es la respuesta a tus necesidades.Él es tu campo que siembras con amor y cosechas con gratitud.Y él es tu mesa y tu hogar.«
•Khalil Gibran
Totalmente identificada. Tambien pasé por algo parecido y es muy dificil. Gracias por escribir esto 💗
Wow gracias por escribir esto es tal cual me siento cuando muchas amistades se fueron sin decirme nada dejándome pensando hoy en día ya no duele. Animo linda vas a ver que con el tiempo duele menos